Pasaba mucho por aquí y tenía muchas ganas de hacer una Boda en Finca La Tayada. Y los elegidos, o elegido por Anibal y Laura fui yo para esta pedazo de boda.

Estoy aquí ahora mismo, sí, en la Tayada, en el intermedio de la comida a la fiesta y he aprovechado para editar alguna foto que les enviaré tranquilamente después de su pequeña resaca.

Que tengo que decir de esta boda? Pues que llevamos una semana que nos vemos casi todos los días, y que la confianza que hay generada es un auténtico lujo. Que me están tratando como de la familia, que gastamos bromas, que nos reímos y que nos divertimos. Y yo creo que esa es la clave de toda buena boda.

Los preparativos de Laura han sido muy tranquilos, como es ella, con su mamá, hermana y su mejor amiga (amiguísima) venida desde Venezuela.

Cuando nos hemos ido con Aníbal todo han sido coñas, risas y buen rollo y…whisky, edición limitada y numerada, of course.

El traje de Laura era de Pronovias y zapatos de Dim Dom y pendientes de Swarovski. Estuvieron las chicas de Urvan, que siempre son un acierto. Anibal iba de Emidio Tucci y Soloio.

Bueno, os dejo, que me voy a verles bailar y como buena boda venezolana…habrá Hora Loca.