De todas las bodas y de todas las parejas se aprende algo. De esta boda en Soto de Cerrolén me llevo muchas cosas, la tranquilidad y buen rollo que transmite Carolina, la fuerza y la protección que transmite Javier, lo poderosa que puede ser la unión de 300 personas (eran esos vuestros invitados?) dándolo todo en vuestra entrada al banquete y sobre todo la energía que hubo durante toda la fiesta.
Y es que, a mi forma de entender, las bodas son bombas de energía positiva, de volver a estar con los tuyos (hoy en día más que nunca) y de disfrutar del día como si no hubiera un mañana. Un día para que nos liberemos, hagamos cosas muy Crazy, nos de todo un poco igual y donde la diversión sea lo principal.
Pues allí que llegamos a Soto de Cerrolén y tocaba por horario hacer la sesión de pareja, con los últimos rayos de sol pero veíamos el cocktail y pensábamos…se va a liar:
Tenía muy claro, desde que conocí a Carolina y Javier, que en Soto de Cerrolén se darían todas las condiciones para una boda llena de intensidad y se cumplió con creces. Mi equipo y yo comentábamos que nunca habíamos visto una entrada a un banquete con tanta caña como esta…pero solo os voy a dejar una fotografía de adelanto de la misma ;P
Cuando vimos a esas 300 personas gritando, jaleando, moviendo sus servilletas como si fuera el día del juicio final…y nosotros en mitad de ese huracán…daba miedo pero madre mía, que divertido! Aunque, como esto es un adelanto voy a contar otro tipo d
Fue una boda religiosa imponente, en la Parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. Volver a ver un recinto lleno, la verdad que apetece y volver a esa normalidad que tanto ansiamos. Se casaban Carolina y Javier pero yo creo que los grandes protagonistas de la ceremonia fueron los más pequeños. Ya veréis todas las fotos de la ceremonia y es que antes quería enseñaros las pequeñas historias que hay detrás esta boda en la que los novios no fuisteis muy conscientes pero nosotros estábamos vigilantes.
Y así terminaba la ceremonia, pero allí les esperaban todos sus invitados para salir de la iglesia:
Y así nos íbamos para Soto de Cerrolén a pasárnoslo bien! Os dejo con alguna fotografía más de la sesión de pareja y el próximo día os cuento alguna cosita más.